Al agregar la digestión anaeróbica al tratamiento de efluentes de un productor de confitería italiano, Fluence ayudó a mejorar los efluentes y producir energía.
La digestión anaeróbica, utilizada para producir biogás, también mejora el efluente del tratamiento de aguas residuales
Un nuevo informe llamado: “Los estados y tendencias del mercado en gases renovables y de bajo contenido de carbono en Europa,” muestra que muchas empresas europeas están adoptando el biometano, un combustible sostenible que se produce a partir de biogás derivado de materia orgánica. El informe fue publicado por Gas for Climate: Un camino hacia el 2050, un grupo de 10 empresas líderes de transporte de gas en Europa y dos asociaciones de la industria del gas renovable.
En la Unión Europea (UE), la adopción de biometano está en marcha. En el 2011, la Comisión Europea (CE), una rama de la UE, estableció un objetivo para descarbonizar completamente su economía para el 2050. A finales del 2019, la CE anunció su Acuerdo Verde, estableciendo un objetivo provisional para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55 % (a partir de los niveles de 1990) para el 2030. Para tener éxito, los sectores de la electricidad y el gas tendrán que cooperar para alcanzar una serie de objetivos, desde la adopción de nuevas tecnologías hasta las mejoras de la red.
Producción de Combustible con Digestión Anaeróbica
Un factor importante para alcanzar estos objetivos es el uso de fuentes de energía alternativas como el biogás y el biometano, una forma más purificada de biogás. La forma más común de producir biogás es un método de tratamiento de residuos llamado digestión anaeróbica (DA). En la DA de conversión de residuos en energía, una materia prima como los efluentes se digieren en un tanque fuera de la presencia de aire, y el biogás resultante se puede utilizar como combustible. La purificación del biogás, mediante procesos que incluyen la separación de membranas, produce biometano. Ambos productos se utilizan como combustible en la UE, pero el uso de biometano está creciendo más rápido que el uso de biogás.
Si bien muchas de las estrategias de descarbonización de la competencia analizadas en el informe se consideran meramente prometedoras o en las primeras etapas de tendencia, se considera que el biometano es la última tendencia que apunta a los objetivos del 2050, y se espera que siga en esa dirección. Por ejemplo, un asombroso 17% del transporte por carretera en la UE ya está impulsado por biometano, y el comercio transfronterizo de gas está aumentando. El uso de residuos y materias primas de residuos para la digestión anaeróbica también está en aumento, una tendencia que se espera que continúe.
La digestión anaeróbica es una realización robusta del modelo de conversión de residuos en energía del modelo de recuperación de recursos y el modelo de la economía circular, tendencias que se están volviendo más populares entre quienes toman las decisiones en el mundo.
Tamaño de la Planta de Digestión Anaeróbica
En la UE, los digestores anaeróbicos varían en tamaño desde pequeñas plantas locales, a aproximadamente 100 Nm³/hr (0,2 Mwel de producción de biogás), hasta más de 3.000 Nm³/hr (salida de biogás de 6,2 Mwel) para grandes plantas industriales, según el informe. El tamaño de las plantas ha estado avanzando a medida que los flujos de residuos se combinan cooperativamente para aprovechar las economías de escala.
Pero incluso en las regiones de la UE donde no hay suficientes residuos para justificar grandes digestores, las plantas más pequeñas se están dando cuenta de los beneficios finales de la instalación de digestores anaeróbicos.
En Italia, por ejemplo, un fabricante de confitería recurrió a Fluence para añadir un sistema de digestión anaeróbica a su tratamiento de efluentes para tratar los efluentes con alto nivel de DQO (Demanda Química de Oxígeno) y recuperar energía al mismo tiempo.
Más Allá de la Conversión de Residuos en Energía
La digestión anaeróbica también produce otros resultados y beneficios ambientales. En primer lugar, puede manejar corrientes de efluentes difíciles de tratar con una alta carga de nutrientes. Un efluente más limpio resuelve problemas de eliminación, reduciendo las facturas de los servicios públicos locales de tratamiento de efluentes e incluso permitiendo la descarga ambiental. El biosólido orgánico digerido restante después de la DA es valioso para la agricultura para la modificación del suelo, y el nitrógeno se puede recuperar durante la digestión anaeróbica para hacer fertilizante concentrado.
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