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Las prácticas como la reutilización del agua pueden ayudar a los agricultores a regar de manera eficaz sus cultivos sin poner en peligro los recursos de agua dulce.

El truco es mantener un equilibrio entre la producción de alimentos y la seguridad del agua

Los cambios en los patrones de precipitación debidos al cambio climático pueden obstaculizar la producción de alimentos, lo que plantea un riesgo para la seguridad alimentaria en todo el mundo a menos que se amplíe la producción.

Según un nuevo estudio publicado recientemente en Environmental Research Letters (Cartas de Investigación Ambiental), el riego sostenible podría aliviar estos riesgos, aumentando el suministro para proporcionar alimentos a más de mil millones de personas adicionales que utilizan nuestras tierras agrícolas actuales sin tener que convertir los ecosistemas naturales en tierras agrícolas. Si bien la conversión de áreas naturales en tierras de cultivo proporcionaría más alimentos, este método también tendría un costo. La eliminación de la vegetación natural no solo provoca una pérdida de biodiversidad, sino que también exacerba el cambio climático.

¿Cómo podemos aumentar la producción de cultivos en las granjas existentes utilizando tecnología moderna y prácticas agrícolas sostenibles?

Cambio Climático y Escasez de Alimentos y Agua

En la actualidad, el 22% de las tierras cultivadas son de regadío y estos cultivos proporcionan el 40% de los alimentos producidos a nivel mundial. Dos tercios de los cultivos producidos en todo el mundo están limitados en cierta medida por las precipitaciones. Debido a que se espera que los patrones de precipitación cambien, y se espera que el estrés térmico en los cultivos aumente con el cambio climático, las precipitaciones por sí solas no pueden garantizar que la producción de cultivos satisfaga la creciente demanda de alimentos.

Una alternativa para aumentar la producción de alimentos es el riego. Si bien se ha demostrado que el riego duplica la producción de cultivos, los recursos hídricos son limitados. Teniendo en cuenta que el riego representa hasta el 90% del consumo mundial de agua dulce por parte de los seres humanos, ¿es posible ampliarlo sin aumentar la escasez de agua?

Irrigación Sostenible

El riego sostenible utiliza agua subterránea y fuentes de agua superficial disponibles a nivel local para regar los cultivos sin comprometer los ecosistemas de agua dulce o agotarlos hasta el punto en que no puedan ser reabastecidos por las precipitaciones.

Para su estudio, Rosa quería evaluar si el riego sostenible podría extenderse para maximizar los rendimientos de los cultivos y minimizar los impactos ambientales negativos asociados con el uso del agua.

Los resultados de su estudio muestran que, en las condiciones ambientales actuales, hay suficiente agua disponible para extender el uso del riego sostenible al 35% de la tierra agrícola a nivel mundial, impulsando la producción de cultivos para proporcionar alimentos a 1.400 millones de personas adicionales.

Rosa, sin embargo, advirtió que es probable que el cambio climático haga las cosas un poco más complicadas en el futuro. Además de los cambios en las precipitaciones y el estrés térmico, también debemos considerar una mayor evaporación de las temperaturas más cálidas, lo que haría que el riego fuera menos eficiente.

De la misma manera, niveles más altos de dióxido de carbono en la atmósfera podrían promover la fotosíntesis y mejorar el crecimiento de los cultivos. Si bien hay cierto grado de incertidumbre, Rosa descubrió que construir depósitos de almacenamiento de agua podría permitir el riego sostenible para alimentar a 1.200 millones de personas más que utilizando solo fuentes de agua renovables.

Reciclaje de los Efluentes para el Reúso

Una solución que podría reducir la presión sobre los recursos hídricos naturales es el reúso del agua. Los efluentes reciclados pueden reutilizarse para regar los cultivos directamente, o pueden almacenarse en depósitos o utilizarse para recargar acuíferos que suministran agua de riego. La recarga gestionada del acuífero es una estrategia que puede aumentar el rendimiento de los cultivos sin agotar los recursos de aguas subterráneas.

La reutilización de los efluentes tratados proporciona una fuente continua de agua de riego que no depende de las precipitaciones. Tener una fuente confiable de agua durante tiempos de sequía reduce el riesgo de fracaso de los cultivos, lo que aumenta la producción de alimentos. Además, los lodos sobrantes del tratamiento de efluentes se pueden utilizar de forma segura como fertilizante.

Fluence ofrece soluciones de reúso de agua energéticamente eficientes para el tratamiento de efluentes a un estándar que cumple con las regulaciones locales de salud y seguridad ambiental. Por ejemplo, las plantas de tratamiento de efluentes modulares Aspiral™ de Fluence producen efluentes de alta calidad que pueden reutilizarse de manera segura para el riego de cultivos y la recarga de acuíferos. Las plantas envasadas ofrecen tratamiento de efluentes en el sitio, lo que permite el tratamiento y el reúso local.

Para obtener más información sobre las formas de ayudar a resolver el hambre en el mundo, póngase en contacto con Fluence. Nuestros expertos pueden ayudarle a encontrar la mejor solución para sus necesidades.

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