Debido a su alta carga orgánica, los alimentos y los efluentes agrícolas son adecuados para la producción de biogás a través de la digestión anaeróbica, lo que puede compensar los costos de energía de producción.
La tecnología de conversión de residuos en energía convierte su alta materia orgánica en biogás para operaciones o venta
Las corrientes de efluentes de producción de alimentos pueden ser algunas de las más desafiantes y costosas de tratar. Su composición varía enormemente de una aplicación a la siguiente, pero una característica se aplica a la mayoría de los efluentes de la industria alimentaria: alta carga orgánica.
Los efluentes de producción de alimentos requieren sistemas de tratamiento costosos, complejos y de varias etapas. El costo de estos sistemas puede ser alto, pero no tratar adecuadamente las corrientes in situ puede dar lugar a una serie de problemas, lo que puede hacer que la inversión en el tratamiento de efluentes in situ sea atractiva si no es imperativa.
Composición de Efluentes de la Industria Alimentaria
Las corrientes de efluentes suelen tener orgánicos nitrogenados, carbono orgánico, sólidos suspendidos, sólidos disueltos e inorgánicos. La carga orgánica de efluentes de procesamiento de alimentos puede ser hasta 10 veces mayor que la de los efluentes municipales.
Las medidas comunes de la carga orgánica son la demanda bioquímica de oxígeno (BOD) y la demanda de oxígeno químico (COD), y los efluentes de la industria alimentaria son típicamente altos en ambos. Las mediciones indican la cantidad de oxígeno disuelto necesaria para descomponer todos los compuestos orgánicos presentes en condiciones específicas.
Si los efluentes de la industria alimentaria se descargan sin tratar en el medio ambiente, la sopa rica en nutrientes puede conducir a la eutrofización, una condición en la que el exceso de nutrientes sobrecarga las floraciones de algas dañinas. Las floraciones, a su vez, usan todo el oxígeno en el agua, lo que conduce a muertes de peces, riesgo para la salud pública y relaciones tensas de la comunidad.
Los productores de alimentos pueden recurrir a plantas de tratamiento municipales para tratar sus efluentes, pero como puede sobrecargar las instalaciones municipales, primero se debe hacer algún tipo de tratamiento in situ para evitar alzas en las tarifas o multas.
Tratamiento de Efluentes de la Industria Alimentaria
En los efluentes de la industria alimentaria, el BOD y el COD suelen ser miles de miligramos por litro, incluso decenas de miles en algunos casos, como efluentes de queserías, bodegas y molineros de olivos. Además, la variabilidad estacional en el volumen de producción también puede aumentar la complejidad del diseño.
Para hacer frente a estos desafíos, un sistema de tratamiento multietapa debe adaptarse a cada operación, lo que representa una gran parte del gasto. Las tecnologías de tratamiento deben elegirse cuidadosamente por su rendimiento en escenarios particulares.
Las tecnologías de tratamiento comunes incluyen opciones tradicionales de tratamiento químico biológico y físico, así como procesos anaeróbicos de conversión de residuos en energía Los pasos pueden incluir flotación por aire disuelto, coagulación, sedimentación y membrana y filtración de carbón activado. Todo esto puede ser complicado por espacio limitado.
Conversión de Residuos en Energía
Debido a su alta carga orgánica, los alimentos y los efluentes agrícolas son adecuados para la producción de biogás a través de la digestión anaeróbica, lo que puede compensar los costos de energía de la producción y también agregar valor al concentrar los nutrientes para abono.
En la digestión anaeróbica, los tanques con temperatura controlada crean un entorno favorable para los microorganismos que digieren los residuos orgánicos fuera de la presencia de oxígeno. Esto produce gases como el dióxido de carbono y el metano, que se cosechan desde la parte superior del digestor y se utilizan para alimentar el proceso térmico o generadores eléctricos para compensar los costos de energía. El exceso de electricidad puede incluso venderse para producir una fuente de ingresos secundaria.
Mejorar el Tratamiento Sin Interrupciones
Las plantas multietapa son complicadas y generalmente las operaciones de procesamiento de alimentos no tienen el lujo de dejar de funcionar para realizar mejoras. Fluence tiene una amplia experiencia en la adición de tecnología de conversión de residuos en energía a los trenes de tratamiento de efluentes de procesamiento de alimentos sin detener la producción.
Tomemos por ejemplo Amadori SpA, uno de los principales productores de agroalimentos de Italia, que necesitaba ampliar la producción y reducir los costos de eliminación de sus efluentes de alto COD. Sin detener la producción, Fluence añadió digestión anaeróbica a la planta de tratamiento de efluentes, existente, reduciendo drásticamente los niveles de lodo, generando más energía de la necesaria para la producción, y produciendo un efluente que cumple con las estrictas directrices de la UE para el vertido en un río cercano.
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