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En una asociación público-privada, un contratista privado cobra solo por los servicios prestados de agua o efluentes.

Los proveedores se benefician al ofrecer un servicio eficiente y de alta calidad

La alineación de intereses se produce cuando todas las partes interesadas se benefician de un resultado particular, por lo que se les incentiva a tirar en la misma dirección para lograr objetivos comunes.

Un escenario en el que todos ganan es en gran parte el motivo por el cual las asociaciones público-privadas (APP) están cambiando drásticamente la forma en que se entrega la infraestructura. Desde los gobiernos estatales en los Estados Unidos hasta las naciones del sudeste asiático, los legisladores están implementando nuevas leyes para fomentar las APP.

¿Cómo funcionan las APP?

Las APP son contratos entre entidades públicas y compañías de agua que funcionan como una concesión. Construir-poseer-operar (BOO, por sus siglas en inglés) y los contratos construir-poseer-operar-transferir (BOOT, por sus siglas en inglés) son dos de los marcos APP más populares.

Bajo los contratos BOO y BOOT, el socio privado (la compañía de agua) asume todo o la mayor parte del riesgo financiero, entrega la infraestructura y opera y mantiene la planta durante un plazo establecido. El socio público paga por los servicios de agua que necesita. Después de que finaliza el período del contrato, a menudo décadas después, el contrato puede ser renovado, o la parte especificada toma posesión de la infraestructura.

Reducir el riesgo

Cuando una entidad pública asume la responsabilidad de una nueva infraestructura, también asume riesgos, incurriendo en pérdidas monetarias si algo va mal con un proyecto. El riesgo es más manejable para una compañía de agua porque tiene amplia experiencia en la entrega de infraestructura y confianza en su evaluación de riesgos.

Bajo el modelo APP, el socio privado asume una gran parte o incluso la totalidad del riesgo. Por ejemplo, los contratos BOO y BOOT ofrecidos por los Servicios de Gestión de Agua (WMS, por sus siglas en inglés) de Fluence eliminan el riesgo de los clientes y ofrecen una infraestructura actualizada sin necesidad de inversión inicial.

Calidad de la infraestructura

Al hacerlo solo, una entidad pública se ocupa de cualquier número de contratistas, desde consultores hasta empresas de construcción y fabricantes de equipos. En la mayoría de los casos, los contratistas cumplen con sus obligaciones, reciben pagos y siguen adelante, dejando a la entidad pública por su cuenta con solo unas pocas garantías una vez que se pone en marcha una planta.

Por el contrario, una APP funciona como una concesión. Debido a que la compañía de agua es responsable del 100% de la operación y el mantenimiento, es de su interés no sacrificar la calidad en la construcción y la calidad del equipo.

La continuidad del servicio es tan importante como el suministro o la mejora de la infraestructura. La calidad y cantidad del agua se especifican en un contrato APP, y la compañía de agua pierde dinero si no cumple con las especificaciones del contrato.

División eficiente del trabajo

Cuando una entidad gubernamental adquiere agua o tratamiento de efluentes, también se enfrenta a la tarea de ejecutarla. Esto significa atraer, desarrollar y retener una fuerza laboral especializada y calificada. Debe desarrollar políticas, procedimientos y programas de mantenimiento extensos y mantenerse al día con las regulaciones a veces onerosas.

Sin embargo, bajo el modelo de servicios gestionados, el agua se maneja por una empresa cuyo negocio y misión principal es el agua. Por ejemplo, Fluence es una compañía global de agua con más de tres décadas de experiencia en el tratamiento de efluentes, reúso de agua, desalinización, agua ultrapura y una gran cantidad de servicios en los sectores público y privado. Hacer que una empresa como Fluence gestione el mantenimiento de la planta reduce mucho el trabajo.

Aunque las APP se centran en las asociaciones público-privadas, los modelos BOO y BOOT también son beneficiosos para las empresas privadas. Al subcontratar la construcción y las operaciones de agua a una empresa de agua con experiencia, las empresas privadas, como hoteles o centros vacacionales, pueden permanecer enfocadas en sus misiones principales.

Contacte a Fluence para saber cómo nuestros servicios de gestión del agua pueden hacer que la infraestructura de alta calidad se realice sin una inversión inicial dejando que usted se concentre en su mejor rol.

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