La industria embotelladora de bebidas utiliza una cantidad significativa de agua. Las empresas monitorean sus esfuerzos para reducir el consumo de agua mediante el análisis del índice de uso de agua (WUR), la relación entre la cantidad de agua utilizada en la producción y la cantidad de producto terminado.
Las soluciones de Fluence ayudan a los fabricantes de bebidas a aumentar la eficiencia y reducir su huella hídrica.
La industria de bebidas embotelladas es líder y satisface la demanda mundial con miles de millones de unidades al año. Sin embargo, esta gran empresa depende de un recurso sorprendentemente delicado: el agua. La gran dependencia de la industria de los recursos hídricos plantea un desafío significativo para la sostenibilidad.
El índice de uso de agua (WUR) es una métrica clave para medir la eficiencia del uso del agua en la industria. Se define como la cantidad total de agua utilizada en todo el proceso de producción, incluyendo el agua utilizada en la limpieza, el embotellado y la refrigeración, en comparación con el volumen total del producto embotellado final listo para la venta.
Monitorear y optimizar el WUR ayuda a las empresas a realizar un seguimiento de sus esfuerzos de conservación del agua, minimizando así su impacto en los recursos hídricos locales. Muchas empresas utilizan el WUR como un indicador clave de rendimiento en sus informes de sostenibilidad para demostrar su compromiso con la gestión responsable del agua.
Fluence ofrece soluciones avanzadas de procesamiento de bebidas que permiten a los fabricantes reducir drásticamente su huella hídrica a la vez que optimizan sus operaciones. Al abordar los desafíos hídricos más urgentes de la industria, contribuimos a garantizar un futuro sostenible tanto para las empresas como para el planeta. ¿Qué desafíos enfrenta la industria de bebidas embotelladas y cómo pueden las tecnologías de Fluence ayudar a las empresas a conservar agua y mejorar la sostenibilidad?
Tecnologías avanzadas de tratamiento de agua de Fluence
Fluence ofrece una gama de soluciones de tratamiento de agua para la industria de bebidas, incluyendo:
Ultrafiltración (UF): La ultrafiltración es un proceso que utiliza una membrana semipermeable, generalmente con un tamaño de poro de entre 0,01 y 0,1 micras, para separar partículas. La membrana permite el paso del agua y los solutos de bajo peso molecular, reteniendo moléculas más grandes como proteínas, bacterias y sólidos en suspensión. En ciertos tipos de bebidas, como jugos claros, aguas saborizadas y tés, la UF ayuda a lograr la claridad deseada al eliminar las partículas y microorganismos que causan turbidez. Esto da como resultado un producto visualmente atractivo con una vida útil más larga. La ultrafiltración se utiliza como pretratamiento para eliminar sólidos en suspensión, materia orgánica, endotoxinas y microorganismos patógenos del agua de alimentación antes de someterla a un tratamiento adicional con procesos como la ósmosis inversa.

La ósmosis inversa purifica el agua forzándola a pasar a través de una membrana fina, maximizando la recuperación de agua y garantizando un resultado de alta calidad para la fabricación de bebidas embotelladas.
Ósmosis inversa (OI): La ósmosis inversa es otro proceso de tratamiento de agua que elimina impurezas forzando el agua a través de una membrana semipermeable, aunque el tamaño de poro es mucho menor, generalmente de alrededor de 0,0001 micras. Los sistemas avanzados de OI están diseñados para maximizar la recuperación de agua, reduciendo la cantidad de aguas residuales producidas durante el proceso de tratamiento y contribuyendo así a los objetivos de sostenibilidad. La ósmosis inversa garantiza que el agua utilizada en la producción sea de una alta calidad constante. La OI ayuda a los fabricantes a cumplir con los estándares de calidad, lograr la consistencia de sus productos y reducir el impacto ambiental mediante el uso eficiente del agua.
Filtración de carbón activado: Los filtros de carbón activado se utilizan ampliamente en la industria de bebidas para la purificación y producción de agua. Desempeñan un papel crucial en la mejora del sabor, el olor y la calidad general del agua utilizada en la producción. El carbón activado se utiliza a menudo como pretratamiento antes de la OI. La eliminación del cloro y otros productos químicos protege las sensibles membranas de OI de daños y prolonga su vida útil.
Ozonización: La ozonización es un proceso de tratamiento de agua ampliamente utilizado en la industria de bebidas para desinfectar y mejorar la calidad general del agua utilizada en su producción. Este proceso implica el uso de ozono (O₃), un potente agente oxidante, para eliminar compuestos orgánicos del agua de origen. Estos contaminantes pueden incluir pesticidas, herbicidas y otros contaminantes orgánicos, microorganismos patógenos y sabores u olores indeseables. Una vez que el ozono completa su proceso de desinfección, se descompone naturalmente en oxígeno, sin dejar residuos químicos. La ozonización se utiliza a menudo en combinación con otros métodos de tratamiento de agua, como la filtración, la desinfección UV y el carbón activado, para lograr un proceso de purificación integral. Este enfoque multibarrera garantiza la máxima calidad del producto final. El agua ozonizada se utiliza a menudo para enjuagar botellas y otros materiales de envasado antes del embotellado, garantizando así que los envases estén libres de contaminación microbiana.
Estudio de caso: Refrescos de Montevideo, Uruguay
Montevideo Refrescos, adquirida por Coca-Cola Femsa en 2018, es la única embotelladora responsable de los productos Coca-Cola en Uruguay, atendiendo a 3,4 millones de consumidores con 26.000 puntos de venta.
Para satisfacer la creciente demanda, la compañía necesitaba ampliar su planta de tratamiento de agua para aumentar su capacidad de producción en 45 m³/h. Fluence diseñó un sistema de tratamiento de agua que optimizó el uso del agua maximizó su potencial de reutilización y garantizó la calidad durante toda la producción.
El proceso de producción de agua tratada, diseñado por Fluence, siguió el concepto de “múltiples barreras” requerido por el cliente, utilizando varias etapas que incluyen filtración mejorada, desinfección, reducción de la alcalinidad, purificación con carbón activado, pulido y, finalmente, tratamiento UV.
El sistema alcanzó índices de eficiencia general superiores al 86 %, excluyendo las pérdidas por retrolavados y saneamiento, gracias a las altas tasas de recuperación de las etapas de ultrafiltración y ósmosis inversa, del 96 % y el 90 %, respectivamente.
Al implementar el tratamiento de agua in situ, los fabricantes de bebidas embotelladas pueden mejorar la eficiencia operativa, reducir costos, promover la sostenibilidad ambiental y optimizar la calidad de sus productos, a la vez que garantizan el cumplimiento de las normas del sector. La amplia gama de tecnologías sostenibles de tratamiento y reutilización de agua de Fluence puede ayudar a su empresa a conservar agua y encaminarla hacia una gestión hídrica sostenible. Contacte con el equipo de expertos en agua de Fluence para hablar sobre sus desafíos específicos y obtener más información sobre las soluciones de tratamiento de agua.